Llega la octava entrega de esta saga que no deja de sorprendernos, ya sea por sus escenas de acción o por sus millonarias recaudaciones en taquilla.
Coches. Explosiones. Culos. Situaciones cada vez más locas. Estos son los ingredientes principales de una de las sagas más rentables de los últimos años, la saga con Vin, Michelle, The Rock y algunos invitados especiales que hacen escenas de acción sin precedentes. No son las mejores películas de la historia, pero tampoco creo que sea lo que pretenden sus productores y guionistas – aunque seguramente Vin sí. ¿Qué podemos esperar de esta octava entrega?
«Fast & Furious 8» es un éxito es innegable, en su primer fin de semana mundial la taquilla internacional asciende a 532 millones de dólares. Sí, habéis leído bien, más de 500 millones de taquilla mundial. Película a película hemos ido viendo como se han ido superando en cuanto a acción, si en una teníamos un tanque en la siguiente los coches saltaban de edificio en edificio y ya en esta última un submarino se ha unido a la acción. Si seguimos así, con este crecimiento exponencial, en la décima entrega veremos como Vin y su «familia» se lanzarán en un transbordador espacial para hacer la primera carrera de coches en Marte.
En esta nueva entrega la unidad familiar será el centro de la acción. Dom y Letty están de luna de miel cuando una misteriosa mujer contacta con Dom. Después de un primer encontronazo, Dom comenzará a actuar de una manera distante con Letty y el resto de su familia, llegando a posicionarse como un villano en toda regla. Desde este momento los vínculos familiares son puesto a prueba para traernos una historia de acción, venganzas y mentiras.
Al igual que en las entregas anteriores, la acción nos lleva de un lado al otro del globo, de climas cálidos a parajes helados, pero todo sin perder ni una pizca de acción. Ya sea en las calles de Nueva York o en un lago helado, nuestros protagonistas tendrán que luchar por alcanzar la velocidad máxima y escabullirse de las garras del villano de turno. En esta ocasión tenemos una villana, Charlize Theron, que aunque no llega a explotar al 100% y si logra marcar un poco más que el resto de contrincantes contra los que se han enfrentado hasta ahora. ¿Alguien se acuerda de los villanos de las anteriores entregas? La respuesta es sencilla, no.
Del resto del cast poca cosa se puede destacar, The Rock y Jason Statham logran comerse con patatas cualquiera de las escenas de la película, ofreciéndonos escenas de lo más divertidas – pensé que nunca iba a decir esto de Jason Statham. La nueva invitada a la fiesta, Helen Mirren, consigue la corona de reina y logra ofrecernos escenas diferentes a lo visto en la saga y elevando el nivel en todos los aspectos. Nunca pensaba que iba a poder ver escenas como estas en esta saga, divertidas, bien actuadas y con un magnetismo fantástico.
Es una película de acción, en la que la historia y lo que va pasando no es lo más importante. ¿Podría estar todo mejor hilado y justificado? Sí. ¿Podría tener mayor profundidad? Sí. Pero eso quitaría tiempo a lo verdaderamente importante en esta saga, los coches y la acción. La gente ama esta saga, no quieren una historia rebuscada ni unos personajes complicados, quieren acción, y la verdad es que si no te gustan este tipo de películas es tan facil como no verlas. Yo sinceramente os la recomiendo, os lo pasaréis bien, disfrutaréis y veréis unas escenas que os harán agarraros a la butaca, esto es cine palomitero. Pero una cosa os digo, Scott Eastwood debería de dejar de hacer cine…