El 11 de marzo llega a las pantallas españolas la tercera entrega de «Kung Fu Panda». De la mano de DreamWorks y con el mismo equipo de animación, nos llega «Kung Fu Panda 3» con Alessandro Carloni y Jennifer Yuh a la dirección y con las voces de Jack Black (como Po), Bryan Cranston (Li), Dustin Hoffman (Shifu), Angelina Jolie (Tigresa) y J.K. Simmons, como el villano de esta entrega, entre muchos otros actores. En esta entrega veremos como Po se debe enfrentar a la llegada de su padre biológico y al villano Kai que quiere arrebatarle su «Chi».
La saga sigue con el mismo toque de humor y locura, a mi las dos primeras entregas me gustaron bastante y aunque esta tercera entrega no llega el nivel de las anteriores, es un fantástico entretenimiento para los más pequeños. No, no creo que sea tan profunda y divertida para que los adultos se entretengan. El problema que veo es que no es capaz de llevar a buen puerto ambas historias (la de la llegada del padre biológico y el villano Kai), pero al final todo se soluciona ofreciendo una animación impecable y mucha espectacularidad, dejando el guión en un segundo plano.
He de decir, que esta última entrega es la mejor en el apartado visual, ofreciéndonos un comienzo de lo más impactante y unas escenas muy llamativas. El problema, que uno salga de ver la película y se olvide de ella con mucha rapidez, desde luego no es una película inolvidable, y no es una de esas películas que cualquiera se lanzaría a recomendar. He leído opiniones que dicen que la película es fantástica, pero no creo que sea así, o por lo menos esa es mi opinión.
Los personajes están completamente desaprovechados, el equipo del: mono, serpiente, tigre, mantis y grulla, están simplemente por cumplir y no poseen ningún tipo de interés en esta entrega, si a eso le añadimos que los osos panda en su mayoria son de chiste fácil, nos encontramos con una entrega carente de personajes. Todo es sobre Po, y aunque el panda sea adorable y de lo más tonto, nos ofrece escenas muy parecidas a las dos entregas anteriores. Vamos, que carece de algo original y diferente.
Parece ser que es el punto final para la saga de Po, pero supongo que dependerá de la taquilla para ver si nos encontramos con el último capítulo del guerrero dragón, o por el contrarío, tengamos nuevas aventuras de este panda muy pronto en la gran pantalla. Para los más pequeños es un sí, para los adultos es un no.
