¿Sabéis que es un DLC? El mundo de los videojuegos ha cambiado muchísimo desde su nacimiento. Hoy en día, las grandes empresas de videojuegos lanzan sus producciones y las expanden mediante DLC que ofrecen nuevas misiones, personajes, etc… Esta es la sensación que me ha dejado Venom: Habrá Matanza. Un DLC de la primera entrega. No lo digo de manera despectiva, creo que han conseguido una película de los más entretenida, divertida y con un ritmo imparable, es una secuela que explota lo que nos ofreció su primera parte, pero es indudable que nos encontramos ante un pequeño extra.
Sin un argumento que haga volar la cabeza de los espectadores, Andy Serkis, director de la entrega, y Kelly Marcel, guionista, nos introducen en la historia en el mismísimo momento en el que termina la anterior película. Es decir, es una secuela nacida, directamente, de la escena postcréditos en la que se nos presentó a Cletus Kasady/Matanza. El villano logra escapar de su prisión y comienza a causar temor en la ciudad, por lo que Eddie, interpretado por Tom Hardy, que sigue habitado por el simbionte Venom, tendrá que intentar pararle los pies.
Michelle Williams continúa en la franquicia, además de los dos villanos de esta historia Naomie Harris y Woody Harrelson. En términos de interpretación la verdad es que poca pega se puede poner, todos cumplen con lo prometido. Además, se agradece que Williams parezca que se encuentra suelta, con momentos más divertidos y saboreando cada escena en la que aparece.
Tiene humor, mucho, tiene locura, muchísima, y todo ello adornado por un ritmo que no se detiene en ningún momento. Su trama es inexistente, villano se escapa y lucha con Venom, pero es innegable que durante hora y media, que es lo que dura la película, uno se encuentra de lo más entretenido. No creo que la película pretenda nada más. Es un simple trámite para lo que vendrá después, creo que eso lo tenemos todos claro. La siguiente entrega de Venom es la que promete.
Venom: Habrá Matanza ya está disponible en cines.
