¿Coleccionar Blu-ray y Dvd es algo malo? ¿Tengo que pedir perdón?

Hace unos cuantos años, el Dvd gozaba de una salud de hierro, llegando a vender cantidades inmensas de discos semana a semana, pero, poco a poco, el comprar estas ediciones se ha convertido en lo raro. Las ediciones 4K, Blu-ray y Dvd continuan llegando a las tiendas, con películas recientes y fondo de catálogo, todo para contentar a aquellas personas que continuamos comprando y disfrutando del formato físico, pero hace unos días se lanzó una pregunta en Twitter. ¿Merece la pena comprar? ¿Ser un coleccionista? ¿Es un crimen gastarse el dinero en un hobby como este?

Durante los últimos años las plataformas han irrumpido en nuestro día a día, de Netflix y Filmin a las más recientes como Apple TV+ y Disney+, y nadie parece plantearse que estar suscrito a más de una plataforma es una locura, ya que ofrecen contenido variado y con exclusividades, pero todo el mundo (mucha gente) ve absurdo que alguien dedique 5 paredes de su casa a tener estanterías repletas de películas y series. Es verdad que el gasto no es comparable, las plataformas tienen un coste de 4-16€ al mes, pero yo me pregunto, ¿Qué ocurre cuando quieres ver una película que no está disponible en ninguna plataforma? ¿Qué ocurre cuando quieres ver Los Goonies? ¿O la serie Buffy, la cazavampiros?

Para ver contenido original las plataformas son una gozada, ver The Mandalorian o Stranger Things en un fin de semana es un placer, o levantar el mando a distancia y elegir una película sin levantarte del sofá, pero yo, y aquí ya estoy hablando de manera muy personal, no creo que las plataformas nos ofrezcan tanta variedad como parece. No es algo malo, para nada, cada plataforma tiene un enfoque, un catálogo, pero en mi caso, me gusta ver de todo, de un clásico de Hitchcock a la película más mamarracha del catálogo de Netflix, como Un príncipe de Navidad, y eso es algo que solo encuentro en mis estanterías (o estando suscrito a 20.000 plataformas).

Ambas cosas, los plataformas y los discos físicos, son complementarios, cada uno con sus pros y sus contras, pero en ningún momento creo que coleccionar películas y series sea absurdo, estúpido. Quizás, algunos nos volvemos locos y compramos todo lo que vemos en las tiendas, probando con películas que no hemos visto y no sabemos que si nos van a gustar, pero la gran mayoría de gente compra películas y ediciones que aman o les llaman la atención. Un steelbook, una edición coleccionista o un pack con una serie al completo.

Yo disfruto con lo desconocido, disfruto teniendo una colección variada y con películas que no había visto, es toda una aventura descubrir una película que seguramente, estando en una plataforma y al alcance de un clic, no vería nunca. Es esa excitación de ver una película por primera vez, sin saber nada sobre ella, sin saber de qué trata, lo que me empuja a las tiendas. Para mí, tener una torre de películas en casa (o una estantería entera, da igual la cantidad) da personalidad a un hogar.