Trece años han tenido que pasar para ver una de las secuelas más esperadas de los fans de Pixar, con permiso de Los increíbles. Esta vez la aventura se centra en el carismático personaje Dory y su don para olvidar todo a la velocidad de la luz, “Sigue nadando, sigue nadando, sigue nadando nadando nadando”.
En esta entrega vemos el pasado de este personaje y una aventura de lo más especial, la búsqueda de la familia que perdió y momentáneamente olvidó. Después de un previously de lo ocurrido en “Buscando a Nemo”, nuestros protagonistas, Marlin, Nemo y Dory se ven en la arriesgada aventura de volver a cruzar el océano para llegar al hogar de Dory. Pero la aventura no es el recorrido, como lo fue en la primera entrega, la aventura comienza en la meta del viaje.
No todo es tan sencillo como parecía… Y ya está, no voy a contar nada más, ahora me voy a limitar a comentar mis impresiones sobre este filme tan fantástico. Sí, fantástico.
Esta secuela ha apostado por una estructura diferente y muy centrada en la figura y personaje de nuestro pez olvidadizo, esto no solo hace que nos parezca ver un filme original (no secuela), sino que nos de la impresión de que es la primera vez que vemos a Dory. Flashbacks entrelazados con momentos en el presente en los que Dory recuerda un pedazo de su pasado, todo para ofrecernos una aventura completa desde el nacimiento de Dory hasta el posible reencuentro familiar.
En esta nueva aventura no podían faltar nuevos personajes como el pulpo Hank, uno de los grandes secundarios de esta entrega, o Destiny y Bailey. Nos encontramos quizá con una aventura más adulta y dramática pero también con una entrega muchísimo más divertida y fresca. No ha perdido nada de personalidad respecto a la primera entrega y lo único que consigue es elevar el listón una vez más. ¿Una tercera entrega? Sinceramente espero que llegue en algún momento, las aventuras bajo el agua nunca habían sido tan divertidas y adorables.
Como director y guionista tenemos otra vez a Andrew Stanton («Buscando a Nemo», «Wall-e») y tanto en la V.O. como en la V.D. cuentan con los mismos actores de doblaje. Yo he tenido la oportunidad de verla en inglés y la verdad es que Ellen consigue dar via a una Dory totalmente maravillosa, hasta ahora para mi Dory únicamente era Anabel. Técnicamente impoluta y con una banda sonora e historia únicas y muy personales. Toda una maravilla de Pixar.
El corto que acompaña a la película, «Piper», es una pequeña maravilla audiovisual, desde luego una de las grandes obras de Pixar en cuanto a animación y adorabilidad. Disfrutar de esta fantástica secuela, que llevamos mucho tiempo esperándola. ¡Por cierto! La película tiene escena post-créditos, no os levantéis de la butaca.
